martes, 15 de diciembre de 2009

HISTORIA DE LA LOCALIDAD DE CHAMIZA

Algunos de los terrenos entregados a los inmigrantes arribados en el “Alfred” o en el “Wandrahm” estaban en la Playa Maitén, en las faldas del volcán Osorno, Piedra Azul, La Laja entre otras. Caso particular es Chamiza, donde el destino llevó a instalarse a otras familias, que a pesar de los años trascurridos, aún mantienen el ambiente y trabajo como una pequeña colonia y localidad aparte.

Hoy día, Chamiza es un poblado de dos mil habitantes, ubicado a 11 kilómetros al oriente de Puerto Montt; sus deslindes generales son: al norte la falda sur del volcán Calbuco; al sur el seno de Reloncaví; al este la localidad de Piedra Azul; al oeste la localidad de Pelluco.

Es, por lo tanto, un sector rural de Puerto Montt; sus habitantes son parte de la población Puertomontina. Todas sus actividades, sean comerciales administrativas, laborales, etc., las realizan en esta ciudad, a la que se encuentran unidos por un camino costero el cual, a su vez, es el inicio de la Carretera Longitudinal Austral, donde actualmente se observa una gran demanda y oferta de parcelas para residencias.

Geográficamente tiene la forma de un valle, siendo atravesado en su extensión de norte a sur por el río Chamiza, llamado también Coihuín. Este río nace en el lago Chapo y después de un recorrido de 25 kilómetros desemboca en el seno de Reloncaví. A través de una serie de afluentes de la región, recibe una gran cantidad de lavas y cenizas provenientes del volcán Calbuco, de tal manera que este río no sólo ha logrado rellenar una bahía de forma circular, sino que además ha logrado formar en pleno seno de Reloncaví un extenso banco formado por una finísima arena negra. Constituye un sitio preferido para la pesca, y al mismo tiempo un punto de reunión de miles de aves acuáticas y palustres, entre las cuales el “sarapito” aparece en bandadas extraordinariamente numerosas.

La fundación de a Base Aérea de Chamiza el año 1929 modificó el ritmo de vida y tranquilidad de la población chamizada. La mayor parte de los vecinos jamás habían visto volar un avión. En potreros adquiridos a Felipe Bernt y Adán Klein, se ubicó la llamada “Escuadrilla de Anfibios”. Con el tiempo la Base pasó a denominarse “Grupo de Aviación N° 5 La Chamiza”. Igualmente en esa época se trazó el nuevo camino para evitar el peligroso y molesto que bordeaba la orilla de la playa. Este camino fue trazado por Coihuín y Pelluco Alto, entrando a Puerto Montt por la Población Lintz.

Con la instalación del Grupo de Aviación fue necesario proyectar ante los organismos estatales la construcción de un nuevo puente sobre e río Chamiza. Tenía 80 metros de largo por 3,50 metros de ancho, excluyendo la calzada para peatones. Fue construido de concreto armado por la empresa “Federico Weise” fabricado en tierra, para instalarlo se empleó el método de flotación, por medio de balsas, aprovechando la marea alta. Entre los escasos acontecimientos que han logrado interrumpir la vida tranquila de la colonia, se mencionan la erupción del volcán Calbuco en el mes de enero de 1929, además del corto tiroteo entre las tropas leales al Gobierno y las de aquella base, en la revolución de 1932. Salvo algunas tejuelas perforadas en el techo de la casa del poblador Klein, no se registro daño alguno

En la carretera, a la izquierda junto al camino existe un monumento conmemorativo a la base de hidroaviones, fundada en 1929 (hasta 1969, Base Aérea la Chamiza) con el objetivo de volar en hidroaviones sobre las islas hasta Punta Arenas. Los intrépidos pilotos amarizaban en Puerto Edén para reabastecerse, en el canal Messier.

Fuente: "Puerto Montt Crónicas y Testimonios de 150 años" de Eduardo Tampe S.J.

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